La Oveja Sambucana


La raza ovina sambucana, autóctona del valle de Stura, es un animal resistente, capaz de vivir incluso en pastos rocosos incómodos y escarpados, se adapta a las grandes altitudes y soporta las bajas temperaturas. Su agilidad le permite cruzar barrancos y pendientes pronunciadas, atravesar paredes rocosas siguiendo los draios, alcanzar las cumbres más altas y poder pastar la hierba más sabrosa, aún no pisoteada por otros animales. Precisamente por estas aptitudes, las ovejas sambucanas proporcionan productos de la máxima calidad: una carne fina de sabor delicado, una lana fina y densa que actúa como aislante natural y es muy resistente cuando se hila, y la leche, que se utiliza primero para alimentar a los corderos y luego para transformarla en leche para la familia y para la venta. A pesar de sus valiosas características, la raza ovina sambucana sufrió un considerable descenso en los años setenta: en la década de 1980 no se criaban más de ochenta ovejas en estado puro en el Valle de Stura, distribuidas en tres explotaciones, de un total de más de cinco mil cabezas.


Las razones del declive hay que buscarlas en el cruce de la oveja sambucana con carneros de otras razas para obtener corderos más grandes. Esto ha provocado una serie de desventajas: la pérdida de características genéticas y morfológicas, un menor rendimiento cárnico, una fuerte caída de la calidad de la lana, mayores necesidades de alimentación, menor rusticidad y, por tanto, menor adaptabilidad al medio ambiente.

Así, desde 1985, la Comunidad Montana Valle Stura y la Región del Piemonte han apoyado un programa de trabajo destinado a recuperar y valorizar la raza sambucana, con el fin de transformarla en un recurso económico para los agricultores del Valle. 

La primera iniciativa de recuperación fue la implicación de una docena de criadores muy interesados y dispuestos a colaborar con los expertos y técnicos de la Comunidad de Montaña. Así, estos ganaderos crearon el Consorcio «L’Escaroun», que en lengua languedociana significa «pequeño rebaño». Posteriormente, numerosos criadores del valle se adhirieron al Consorcio, que actualmente cuenta con unos sesenta miembros.


Entre las numerosas actividades del Consorcio, destacan el estudio de las características de la raza, la creación de un centro de selección de carneros, la reactivación de la antigua feria de los Santi di Vinadio mediante la creación de la muestra ovina Sambucana y la organización de la comercialización. El Consorcio está muy atento a la forma de criar los corderos: garantiza que las ovejas criadas por sus miembros y vendidas en las tiendas que exhiben la marca de cordero Sambucano se nutran de leche de ovejas alimentadas exclusivamente con heno producido localmente o con hierba fresca de los pastos de montaña.

La creación de la etiqueta es uno de los pasos más importantes en la comercialización del cordero sambucano porque permite al consumidor conocer la calidad y el origen del producto adquirido. En la actualidad, la raza ovina sambucana está presente en el valle en un número aproximado de 5.500 cabezas, distribuidas en unas sesenta explotaciones.


Otra iniciativa igualmente importante para la promoción de la oveja sambucana fue la puesta en marcha de una asociación para la venta de carne de cordero, mediante la creación de la cooperativa «Lou Barmaset», que comercializa anualmente unos 10.000 corderos de las explotaciones locales.

El trabajo de todos estos años ha dado extraordinario resultados, el más prestigioso de los cuales es el reconocimiento de los productos de la oveja sambuca como Baluarte Slow Food (haz clic en Baluarte Slow Food para ir al sitio web Agnello sambucano – Presìdi Slow Food) y como Producto Agrícola Tradicional (PAT) de la Región del Piemonte.

Para la valorización de la lana, a lo largo de los años se han realizado experimentos de transformación del producto con la Fábrica de Lana de Piacenza, en Biella, y la Agencia Lane Italia. Los artículos de lana sambucana elaborados pueden adquirirse en el punto de venta del Eco-museo de Pontebernardo, en la sede de la Unione Montana y en la cooperativa «I Lauri» de Demonte.